ARNICA MONTANA EXTRACT

Conocida como planta medicinal desde el siglo XII, crece en las montañas centroeuropeas y en Europa del este.
Gracias a sus propiedades analgésicas y antiinflamatorias se ha empleado en el tratamiento de contusiones y contracciones musculares, además de inflamaciones y esguinces.
El poder del árnica reside en las aproximadamente 150 sustancias activas que componen sus flores de color amarillo radiante. Entre ellas, se encuentran flavonoides, carotenos, resina y aceites esenciales naturales. Además, contiene ácido silícico, una sustancia básica y nutriente para la formación del tejido y la estructura de la piel, que garantiza la retención necesaria de agua en nuestras células. De hecho, ninguna otra sustancia puede retener 300 veces su peso en agua. Lo que convierte a esta planta líder en perfecta para la regeneración del tejido conjuntivo después de lesiones, golpes o contusiones.
En el siglo XVIII se utilizaba en el tratamiento de reumatismo y varices, posteriormente el extracto del árnica ha mostrado, a través de estudios clínicos, su eficacia como antiséptico capaz de estimular la circulación sanguínea, aliviar el dolor y acelerar el proceso curativo. Gracias a todos estos beneficios, el árnica es conocida también como “el santo patrón de músculos y hematomas.

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